Día 40 - ¿Por qué tienes esa cara de amargado?

Miércoles ☁️🌡️ 9°

Por aquí sigue todo nublado. 

Bitácora 📝⛵

Miércoles 09 de Febrero de 2022

Comienza un nuevo día y lo primero que quiero hacer es agradecer a Dios que me permite seguir con vida y me permite compartir estas cosas.

Todos sabemos que nuestro  recorrido puede terminar en cualquier momento, pero si ya estamos en la embarcación del Capitán, si cada día navegamos con el Señor, entonces no debemos tener ningún temor.

Me preocupan algunos seres queridos que todavía siguen navegando a su propio ritmo. Siguen sus ideas, sus deseos, sus pensamientos y no aceptan nada de lo que aquí les cuento.

Algunos están siempre enojados, otros están asustados. Otros navegan sin estar preocupados, piensan que por ser buenas personas ya están asegurados. Está aquel que siempre tiene la cara de amargado. El problema en todos los casos es que el pecado todavía no ha sido quitado. Si esto no lo resuelven ahora ya no tendrán escapatoria cuando crucen del otro lado. 

Por todos mis familiares y por mis amigos a Dios le pido, porque muchos de ellos están navegando perdidos y van a perecer si no lo llegan a reconocer.

Cada día ruego al Capitán por ellos. Aunque algunos están muy lejos, el Señor tiene obreros por todas partes y puede enviar a cualquiera para que les hable. Basta una sola palabra para que ellos crean y se salven antes que sea muy tarde.

Esta mañana sigo leyendo el Gran Libro y aprendiendo de lo que ya está escrito.

Génesis 4:3-5

"Pasando el tiempo sucedió que un día Caín presentó al Señor una ofrenda del fruto que había cosechado de la tierra.

También Abel, por su parte, trajo lo suyo. Buscó lo mejor de las primeras crías de los corderos de su rebaño. Por esto el Señor se agradó de Abel y de lo que había ofrendado, pero no miró con agrado a Caín con lo que había entregado.

Por este motivo Caín se enfureció en gran manera y puso muy mala cara. Se notaba lo abatido que estaba.

Entonces el Señor le habló diciendo: 

- "Por qué estás tan enojado y tienes  esa cara de amargado?

Si haces lo que es debido serás enaltecido y puedes andar con el rostro erguido, pero si te niegas a hacer lo correcto, entonces ten mucho cuidado. El pecado está a la puerta, agazapado como una fiera, listo para atacarte. Pero tú puedes dominarlo."

Luego de leer este relato vuelvo a  pensar en Adán y Eva. Los primeros seres humanos sobre la tierra. Ellos nacieron sin pecado, nacieron sin una herencia familiar a la que pudieran culpar por su mal obrar.

Podemos decir que la primer pareja no tenía experiencias negativas de la infancia. No tenían  traumas por el maltrato de sus padres y no podían decir que su fracaso en obedecer a Dios era por la familia que los crió.

Muchos en la actualidad piensan que su mal carácter o sus vicios, sus pecados y los problemas que tienen en el presente son por culpa de los parientes y probablemente en algún aspecto tienen razón.

Ahora yo me pregunto... ¿A quién podían culpar Adán o Eva por haber desobedecido y haber comido de lo prohibido?

Lo cierto es que si ellos fueron expulsados del Edén tan precioso y  se perdieron el acceso al Árbol de la vida no fue por otra razón que por seguir el engaño y los deseos del corazón.

En el caso de Caín y Abel las cosas son diferentes. Ellos son los primeros dos niños que nacieron de padres desobedientes. Ellos sabían que estaban lejos de Dios.

Seguramente Adán les enseñó que había una sola manera de acercarse a Dios y era haciendo un sacrificio, una ofrenda. 

Había un solo camino y ellos lo sabían, si querían ser aceptados debían presentar la primicia, un cordero muy especial seleccionado  entre todos los demás y separado para ser consagrado. 

Esto queda demostrado porque solo el sacrificio de Abel fue aceptado y lo que trajo Caín fue rechazado. Él no quiso hacer lo que ya se le había indicado.

El relato nos dice que Caín estaba muy enojado. Dios lo observa con su rostro amargado. Luego le habla con paciencia para hacerle entender que si no se procede según lo que ya ha sido trazado, se le está dando lugar al pecado.

Caín tenía la misma oportunidad que en el principio tuvieron sus padres. Él tenía el poder para controlar la situación. Debía decidir creer y obedecer o rechazar el consejo y perecer.

En la actualidad nosotros tenemos un solo camino para acercarnos a Dios. Ya fue trazado desde el principio. Un cordero Santo fue entregado en nuestro lugar. Ya no hay otra ofrenda que podamos presentar. 

Jesús es el Cordero Divino. Solo quien recibe su sangre y cree en su sacrificio es agradable a Dios y tiene salvación. 

Si hacemos como Caín y seguimos nuestra voluntad, ofreciendo otros sacrificios, siguiendo las ideas de otra religión entonces nuestra ofrenda será rechazada. Por más esfuerzo que hagamos no seremos reconocidos. Hemos dado lugar al pecado y hemos desobedecido. 

Querido navegante espero de todo corazón que consideres esta gran lección. Solo una ofrenda recibe Dios el Padre y es la que su Hijo Jesús ya presentó en la Cruz.

Solo quien se acerca por este camino al final será bien recibido.

Hasta la próxima.

Gerwuer

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