DESPEDIDA. El dolor del último adiós. Pensando en la tía Elsa.


¡Qué duro es tener que decir adiós!. Despedir a un ser amado. Ver que su pequeña barca de madera se aleja y cruza hacia el otro lado es algo que nos deja con el corazón destrozado. Pero, podemos tener tranquilidad cuando sabemos que esa persona realmente descansa en Paz.

Gerwuer

Freitag (Viernes)

⛅🌡️4°⛵


El mes de Febrero ya se ha ido y tristemente se ha llevado consigo a un familiar querido.


Hoy, el corazón de la familia, está muy dolorido, y no es para menos. La vida se nos da vueltas y todo nos afecta cuando una persona amada termina su recorrido. Cuando llega el final, nosotros los que quedamos nos sentimos muy mal. 


Si bien sabemos que el viaje, en este mar de la vida, en algún momento se nos termina, es una realidad que todos sufrimos por nuestra parte cuando alguien que amamos parte.



Esta situación me ha llevado a recordar las palabras de un Salmo que me encanta y comienza de esta manera:


“Dios es nuestro amparo, y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las aflicciones. Por lo tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza.”

(Salmos 46:1-3)


¡Cómo me gusta este Salmo!

Muchas veces lo he compartido... 


Yo quiero agregar...


“¡¡NO TEMEREMOS!! 

Aunque todo se nos complique y la vida se nos venga a pique.


¡¡NO TEMEREMOS!! 

Aunque el mundo se nos ponga de cabeza! Aunque todo se oscurezca, y la situación no mejore... Aunque veamos que algunos seres amados terminan su recorrido, no temeremos por las tormentas que han venido”


Lo que ahora mismo me pregunto es...


¿En verdad lo estoy experimentado en este viaje de la vida o solo es algo que otro dijo y que me gusta, lo comparto, pero no lo aplico? ¿Estoy permaneciendo bajo el abrigo de Dios?


La calma en la tormenta no se experimenta por saber o conocer que Dios es el refugio seguro en la aflicción, sino más bien por la acción de correr hacia Él y permanecer bajo su protección. 


Si sabes, pero no haces, no te beneficias de lo que sabes. El que conoce la verdad bíblica pero no la cree, o no la aplica, no está en mejor situación que aquel que ignora las cosas del Señor.


Ayer mencioné en la Bitácora 👉Siete pasos que son necesarios para alcanzar la Sanidad Espiritual, pero dije que entre todos estos, hay uno que es el fundamental, el principal.


En resumen, solo hay un paso que nos da la Salvación y es creer, es recibir a Jesús como Salvador.


Mira lo que dice La Biblia hablando de Jesús:


“Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo. En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.”

(Juan 1:9-10)


¿Qué pasó? Qué la gente del mundo no entendió que Jesús era el mismo Dios, que era el único Salvador, el único mediador entre el Hombre y su Creador. No creyeron en su mensaje, no le conocieron. No le siguieron y por lo tanto, tristemente, se perdieron.


La Biblia sigue diciendo:


“A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”

(Juan 1:11-12)


¿Estás entendiendo?

Juan está diciendo que Jesús a su gente vino, por decirlo así a sus propios familiares les habló... pero ninguno le escuchó. La gente de su propia tierra no le creyó... más hubo algunos que sí le creyeron, y lo siguieron. Esos que sí le creyeron, de inmediato fueron adoptados como hijos amados. 


Claramente podemos ver que:


No todos los seres humanos son Hijos de Dios... No todos estan a bajo su cuidado. SOLO AQUELLOS QUE CREYERON Y RECIBIERON A JESÚS SON SALVOS. Ellos tienen completa protección y descansan en paz porque saben que llegarán al Hogar Celestial.


Literalmente, los que en vida fueron verdaderos creyentes, pasaron a ser hijos de Dios eternamente. Es decir que recibieron una nueva vida llena de esperanza. Experimentaron una transformación que solo se produce por la gracia de Dios.


Ahora, mi querido lector, debes comprender que esto de creer en Jesús y recibir su perdón, su salvación, se debe hacer en vida porque después ya no existe ninguna alternativa. Ahora te debes refugiar si de la tormenta te quieres salvar.


Es mejor que este mensaje lo creas y lo entiendas hoy. Te aseguro que mañana será muy tarde si hoy se termina tu propio viaje. Es verdad que hay que estar bien prevenido, pues nunca jamás nadie ha sabido cuando terminará su recorrido.


Por favor detente y considera lo que he mencionado en el día de hoy.


Te recomiendo, además que leas lo que escribí ayer. Tocando aquí 👉 Siete pasos que son necesarios para alcanzar la Sanidad Espiritual


Aplica la lección y tendrás Salvación.


Abrazo fuerte y a seguir navegando contra la corriente. 


Gerwuer ⛵️


Del Autor al Lector:

Todo lo que comparto en la Bitácora es con el deseo sincero de ayudar a las personas a CONOCER a Jesús, quién es el verdadero Dios.


Que muchos más lleguen a CREER, CRECER y COMPARTIR la Fe en el Salvador, esa es mi misión, mi pasión y mi oración.


Si este propósito se cumple entonces ha valido la pena todo el tiempo invertido en esta faena.

Si quieres colaborar de alguna manera comparte con otros estos mensajes y espero que nos encontremos al final del viaje.


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