Día 105 - Ya está abierto el camino al árbol de la vida.

Viernes ☁️🌡️7°

Hoy es 15 de Abril de 2022

Es verdad el Camino ya está abierto y solo te debes acercar. Come del precioso Fruto y Nueva Vida tendrás.

La Bitácora 📝⛵

Llegamos al día viernes, pero, para nosotros, este no es como cualquier viernes, es un día muy especial, porque hacemos memoria de aquel que nos vino a salvar.

Ayer, casi al anochecer, nos encontramos con algunos navegantes para velar y orar. Nos reunimos en una gran sala, donde, al frente, se podían ver unos árboles de olivo. 

No pude dejar de pensar en Pedro y todos los demás discípulos, aquellos que, en la última noche, cuando Jesús les dijo: "Velen aquí conmigo" no fueron capaces de resistir y se quedaron todos dormidos.

Es que podemos tener el espíritu muy dispuesto, pero nuestra carne sigue siendo débil. Aún así debemos hacer el esfuerzo por velar y orar en todo tiempo, de lo contrario el enemigo nos dejará mal heridos. Debemos saber que no tendrá ninguna consideración si nos encuentra dormidos.

Como venía diciendo, estuvimos reunidos por varias horas, cantando y adorando a nuestro Señor, dedicamos también un buen tiempo a la oración intercediendo por los gobernantes de toda nación.

Por otra parte, estuvimos orando por todos los seres humanos que ahora sufren a causa de la cruel Guerra entre estos dos pueblos que son como hermanos. 

Nos acordamos de orar por los misioneros, esos que llevan el mensaje del Evangelio al mundo entero. 

Hoy nos volveremos a encontrar. Es que estos días, para nosotros los navegantes del Capitán, tienen una importancia especial. Nos ayudan a sacar la mirada de lo terrenal para fijarla en lo que es eternal. 

Este día viernes, en particular, nos ayuda mucho pensar en el tremendo sacrificio del Señor muriendo en la Cruz a nuestro favor. Nos hace bien entender que:

"Si él nos pudo amar tanto cuando todavía estábamos sucios y condenados por todos nuestros pecados, con más razón nos ama ahora que ya nos ha lavado y con su propia sangre nos ha comprado." 

Me encanta como lo expresa Juan en su primera carta:

1 Juan 4:9-10

"En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él.

En esto consiste el amor: 

No en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados."

La palabra propiciación hace referencia a ese acto por el cual el fuego de la ira de Dios queda completamente apagado porque todo está saldado y terminado.

Jesús es aquel que ofreció su cuerpo como un Cordero en el altar. Se quemó por completo dando su vida para terminar con la ira que el pecado original trajo sobre toda la humanidad. 

Juan dice en su carta que este sacrificio es el don de Dios, la gracia de Dios, la misericordia y el favor de Dios demostrado para con todo aquel que ha pecado y no existe ningún ser humano que esté libre de culpa por lo tanto la gracia se extiende para todos gratuitamente. Nadie lo merece, nadie puede pagar. Es un don que por fe se debe aceptar. Solo se beneficia aquel que puede creer en esta verdad: Jesús es el Salvador disponible para toda la humanidad.

1 Juan 2:2

"Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo."

Por esto nunca debemos escuchar al malvado de Satán quien viene para recordarnos los pecados del pasado, aquellos por los cuales ya Cristo murió en la Cruz clavado.

El Diablo ya ha sido derrotado pero nos miente porque quiere que sigamos siendo sus esclavos.

El día de hoy es un día sombrío. Las densas nubes cubren todo el firmamento y el sol no se verá en ningún momento.

Todo me lleva a pensar que un día como hoy, pero hace más de dos mil años atrás, sucedió algo similar. 

Una gran oscuridad llegó cuando era pleno medio día y hasta las tres de la tarde no sé podía ver ni lo que se comía. Fue justo en aquel momento cuando Jesús en la Cruz moría, dando un gran suspiro y un lamento que expresaba su agonía. 

Jesús al morir decía: 

"Consumado es" o "Hecho está"

Lo asombroso es que al mismo tiempo el gran velo del Templo se partía, dejando un solo camino abierto para poder llegar nuevamente hasta el árbol de la vida.

Esto nos cuenta Marcos en su relato del evangelio:

Marcos 15:37-38

"Mas Jesús, dando una gran voz, expiró. Entonces el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo."

En el principio, a causa del pecado, el camino a este árbol quedó cerrado y nadie podía acercarse, pero Jesús con su muerte aplastó la cabeza de aquella antigua serpiente. Cumpliendo así la primer profecía. 

No lo dudes. Con esto queda muy claro que Jesús es el auténtico Mesías. Solo por Él llegamos a ser salvos, solo por él tenemos una nueva vida.

Esto no es ningún cuento, el camino al árbol de la vida ya se encuentra nuevamente abierto. Ven ahora a Jesús y no pierdas más el tiempo.

Que Dios te bendiga.

Hasta la próxima

Gerwuer

Lectura Anual 📖

1 Reyes 20 al 22