Día 123 - Palabras de fe y aliento.

Martes🌥️🌡️2°

Hoy es 03 de Mayo de 2022

"Un mensaje muy especial para todo aquel que sirve al Capitán, y para todo Navegante que se siente amargado, desilusionado o a tal vez punto de morir ahogado."

¡Vamos Navegante!

Sigue firme y adelante, aunque soplen malos vientos, mantén la mirada en alto y no pierdas la calma recuerda que el Capitán conduce la Barca.

La Bitácora 📝⛵️

Aquí estamos comenzando un nuevo día. Hemos zarpado con alegría a pesar que la situación no mejora y nos golpean varias olas. 

El Virus malvado sigue haciendo de las suyas y la guerra en Ucrania ha destruido muchas vidas en Bucha.

Los que navegamos con el Comandante clamamos y pedimos de manera constante que todo esto se termine, porque ya no hay quien aguante. Pero queremos aferrarnos a Él por la fe y seguir firmes y adelante. 

Debemos confiar y orar sin desmayar, sabiendo que siempre se hará su perfecta voluntad, aunque nosotros no entendamos ahora, Él sabe por qué no se calman las olas.

Esta Barca de la Vida, que dirige el Capitán, sigue navegando por su gracia y nada más.

Doy gracias por este nuevo día y mi mayor anhelo, mi oración, es que todo Navegante reciba la bendición del Señor, reciba su consuelo en la aflicción, reciba edificación, reciba orientación. 

En todo tiempo necesitamos que sea Dios el que hable a nuestro corazón porque solo así podemos cumplir con la vocación. 

Hemos sido llamados a proclamar la verdad en una sociedad que navega perdida, confundida, engañada y dolorida. 

Todos deben saber que solo en Jesús el hombre encuentra la Salvación, el perdón y la paz con Dios.

Estos días, al navegar, pude compartir que la amargura y la desilusión también asaltan mi corazón, pero la verdad que hoy me siento mejor y quisiera contar aquí cual ha sido la razón.

Hemos comenzado el mes de mayo y como les he compartido, desde temprano vengo escuchando el Canto del Gallo.

Esto me ayuda a velar y orar, despertarme temprano para estar a solas con el Capitán.

El domingo pasado pude comprobar cual es uno de los pasos que debo dar para evitar la amargura. Es decir cuál es la solución para la desilusión.

He comprendido que todo comienza con abrir el corazón, sacar aquello que tanto nos pesa, ser honestos, y no mostrar una careta. 

Fue tan especial poder hablar con varios amigos preciosos, varios navegantes del Señor. Pude abrir con ellos el corazón y sus palabras obraron en mí para devolverme la ilusión. 

Muchos me escribieron y me alentaron y hasta hubo dos, (ellos saben quienes son) que un video me grabaron y fueron de gran bendición. 

No puedo compartir todo lo que me han dicho, pero agradezco por cada mensaje recibido.

Pero hay un mensaje que si quisiera compartir porque las palabras son apropiadas para lo que intento decir. 

El 1 de Mayo mi propia hermana me escribió lo siguiente:

"Querido Germán. 

Hoy es el día del trabajador, feliz día en primer lugar. 

Todos trabajamos en distintas tareas. Pero hay algunas que el resultado se puede ver de inmediato y hay otras que tardan 15, 20, 30 o 50 años en dar sus frutos y lo que tú haces es un trabajo a largo plazo, no pienses a corto plazo, porque tu trabajo es para el Señor, como bien dices. 

Los frutos de tu esfuerzo quizás no los veas hoy, no veas un mensaje de agradecimiento, no veas un tilde azul de recibido o de que lo han visto. 

Sé como el Sembrador que salió a sembrar, su vista no estaba puesta en la semilla que salió a plantar, sino en el resultado que el tiempo llegaría a dar. Te quiero con todo mi corazón."

Sus palabras me animaron y espero que animen a otros sembradores que están mirando el campo sin ver los resultados de todo lo que han trabajado.

Es que algunas veces un sembrador se desilusiona porque no ve que la semilla esté germinando. Pero debemos saber que siempre algo está pasando.

Un pescador se frustra porque pasa días y noches tirando la red a un mar que gime y llora, como dice Marcos Vidal en una de sus canciones, pero aún así hay que remar y resistir, hasta que salga la Luz de la aurora.

Hay que remar y remar, sin temer y sin dudar, tirar la red con fe y esperar poder pescar, aunque este mar no nos entregue ni siquiera un pez para alegrarnos y celebrar.

Qué dolor siente el obrero que sale a trabajar y se esfuerza por construir y edificar pero no ve que su labor esté dando resultados.

Con todo esto pude entender que estaba equivocado y pude recordar que uno debe seguir sembrando la buena semilla. En algún momento alguna germina y se ven los resultados. 

Pero hay que tener cuidado cuando uno abre el corazón porque puede ser atacado, criticado, herido, traspasado. 

Advierto que hay navegantes endurecidos, hay cristianos desabridos, fríos, apagados, hay personas que son dañinas, cáusticas, corrosivas y si les cuentas tu situación probablemente aumentarán tu amargura y tu desilusión.

Lo mejor que podemos hacer es doblar las rodillas, buscar al Capitán, derramar toda nuestra aflicción, nuestra amargura y frustración ante el Señor porque solo Él puede mostrarnos compasión.

Dios se acuerda que somos barro y nos ama tanto como para abrazarnos aunque estemos sucios. No lo entiendo porque él es Santo, pero nosotros somos inmundos. Él está limpio y nosotros damos asco, somos repugnantes. Pero decidió amarnos, venir al mundo y rescatarnos.

Realmente en la Cruz se desnudó para vestirme a mi. Su sangre derramó para limpiarme a mi. Murió y resucitó por este inmundo pecador. Si eso no es amor entonces ¿Qué es amor?

En estos días pensaba que cuando alguien te escribe o te habla y tú no le contestas, no le das ni la hora, en realidad le estás contestando, pero de otra manera: Le estás diciendo tu mensaje no me interesa. Lo que dices no es importante. No tengo tiempo para escucharte.

Por favor que nadie se confunda. No me interesa que me escuches o me leas a mi. 

¡No, y absolutamente no!, eso no me preocupa ni me apena. 

Lo único que deseo es que escuches a Dios que te está hablando de diferentes maneras.

Nos habla por todos los medios posibles. Puede usar el Canto del Gallo para despertarnos y abrirnos los ojos. 

Él nos hace saber cuándo nos hemos alejado, cuando hemos pecado o cuando lo ignoramos vez tras vez.

Él nos habla por medio de esta Bitácora, nos habla por medio de los Hermosos Libros escritos por otros hermanos. Nos habla por medio de la creación. Nos habla con su Libro Sagrado.

Si mi querido amigo, mi querido hermano Dios nos habla por todos lados pero me duele ver qué muchos lo siguen ignorando.

Aún así hay que seguir predicando, hay seguir llamando al pecador para que se arrepienta y se convierta a Jesús el Salvador.

Quiero terminar la Bitácora de hoy recordando las palabras de Jesús cuando, desde La Barca, habló a una multitud a la orilla del mar y les dijo:

Lucas 8:5-8

"El sembrador salió a sembrar su semilla, y al sembrarla, una cayó junto al camino y fue pisoteada, y las aves del cielo la comieron.

Otra cayó sobre terreno pedregoso, y habiendo brotado, se secó por no tener humedad.

Otra cayó en medio de las espinas, y creciendo juntamente las espinas, la ahogaron.

Y otra cayó en buena tierra, y habiendo crecido, dio fruto a ciento por uno. 

Diciendo estas cosas, exclamó: 

¡El que tiene oídos para oír, oiga!"

Ahora yo agrego como cierre final:

El que quiere leer, que lea. 

El que quiere encontrar que busque.

El que quiere recibir que pida.

El que quiere que lo atiendan, que llame a la puerta y el que se quiere salvar que crea, que suba a la Barca y navegue con el Capitán.

El que no quiera creer, no lo puedo obligar, pero debe saber que no se podrá salvar.

Hasta la próxima

Gerwuer

Escucha 👉 Aquí  "Soy Pescador" de Marcos Vidal

Lectura Anual 📖

2 Crónicas 5 al 8