Consejo Celestial: Pon tus ojos en Cristo y deja de mirar el Temporal.

Pon tus ojos en Cristo, tan lleno de gracia y amor. Deja de lado el temor y aférrate a la Palabra de tu amado Salvador.

Gerwuer

Freitag (Viernes)

🌧️🌡️8°⛵

El día de hoy ha comenzado y lo estoy recorriendo como el Capitán nos ha indicado a todos los que navegamos a su lado.

☀️ Deseo que seamos capaces de mantener la mirada puesta en las cosas de arriba a pesar de cualquier aflicción que enfrentemos aquí abajo ⛈️

Quisiera volver a compartir algunos de sus dichos, pues tal vez hay navegantes que se han quedado dormidos, o estaban muy distraídos y la voz del Capitán no han oído: 

Esto es algo de lo que nos dijo:

“Pongan la mirada en las cosas de arriba, y no en las de la tierra.”

(Colosenses 3:2)

Para mí esto ha sido un gran llamado de atención pues muchas veces mi vista se enfoca en la situación actual en lugar de mirar hacia la Eternidad.

Al igual que le pasó a Pedro hace ya mucho tiempo, más de una vez me he estado hundiendo por mirar las aguas y los vientos en lugar de mantener los ojos en mi Maestro.

Las tormentas no se han debilitado. Los vientos siguen soplando y aullando.

Las aguas siguen sacudiendo el Barco. Las nubes oscuras me siguen rodeando pero el Capitán ya me ha dicho que debo poner la mirada solo en Él y no debo temer a lo que pueda suceder.

Esto que sufrimos es MUY REAL, pero es tan solo TERRENAL.

Sí que duele. Sí que asusta, eso no se puede negar... ni se puede ocultar, pero si se puede confiar y recordar que: TODO EL DOLOR QUE PASAMOS ES TAN SOLO TEMPORAL.

Quiero mencionar algo más que me ha dicho el Capitán cuando he apartado un tiempo para estar a solas con Él. Son Palabras que nunca debo olvidar. 

El Señor me ha  dicho:

“Marinero del Velero, no te preocupes por nada mientras navegas rumbo al cielo, recuerda que debes permanecer velando en oración y ruego, dando gracias por todo y en todo tiempo.”

En realidad lo dijo de esta manera por medio del apóstol Pablo:

“Por nada estén afanosos, sino sean conocidas sus peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.”

(Filipenses 4:6)

El maravilloso resultado de obedecer lo que el Capitán me ha hablado es que puedo seguir navegando tranquilo a pesar de los problemas que han surgido.

La Paz de Dios me inunda el corazón cuando decido orar y agradecer por cualquier situación.

Pablo dijo y yo creo que es por su propia experiencia, que el resultado final de la obediencia al mandato de orar y agradecer, es la Paz de Dios que podemos llegar a tener:

“Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

(Filipenses 4:7)

En mi caso personal ya he comprobado que cuando dejo de pensar conforme a lo que se me ha enseñado, termino frustrado, deprimido y amargado.

Todo marinero que decide navegar por la vida ignorando los consejos que vienen de arriba, termina perdido en su aflicción y tarde o temprano destruye su propia embarcación.

Me despido aquí por hoy.

Recuerda marinero que tú también debes orar, debes dar gracias y alabar al Señor a pesar de la tormenta que ruge a tu alrededor.

Abrazo grande

Gerwuer ⛵️