Día 184 - Ayuda para seguir, cuando te asusta lo que ves venir.

Domingo ☀️🌡️16°

Hoy es 03 de Julio de 2022

La Bitácora de Gerwuer 📝

"Con todo, yo me alegraré en el Señor y me gozaré en el Dios de mi Salvación"

Habacuc 3:18

Para poder seguir adelante recuerda permanecer escuchando la voz del Comandante.

Querido navegante, si no quieres naufragar en este mar de la vida, asegúrate de escuchar y obedecer la voz de aquel que, ahora mismo, no puedes ver.

Esa voz que te habla en la oscuridad. Esa voz qué te advierte del peligro en el mar, es la voz del Capitán. 

Aunque su mensaje te llegue por medio de un simple marinero, es Dios mismo quien te habla y te muestra el camino verdadero.

Llegamos al primer domingo en este nuevo mes de Julio que  estamos recorriendo y como dije ayer, aveces las cosas no salen como nosotros queremos.

¿Qué haces cuando, de pronto, en tu vida todo se altera?

¿Cómo reaccionas cuando no entiendes lo que pasa, no aceptas aquello a lo que te enfrentas?

¿Hacia dónde te diriges cuando ves que sube la marea y una ola gigante hacia ti se acerca?

Me refiero a esas situaciones que son inesperadas y que pueden llegar de la noche a la mañana.

Tal vez te ha llegado un aviso de despido, y ahora te sientes abatido. Sabes que hay muchas cuentas pendientes, y no tienes idea como cumplir con toda la gente.

 

Tal vez ahora te encuentras en la cama de un hospital, los resultados médicos son muy negativos, y te sientes abatido.

¡Hay tantas cosas que pueden venir a la vida en el momento que menos pensamos!

Nuestra manera de reaccionar, cuando no podemos ver, es lo que nos permite demostrar, si la fe que profesamos tener, es real."

Esta mañana pienso nuevamente en Ucrania. Casi se cumplen 130 día de combate. El panorama no es alentador. Parece que todo va de mal en peor y el futuro es desolador.

Pienso en tantos que han perdido la vida, todo esto es espantoso y muy doloroso.

Si escucho las noticias me desanimo. Es muy oscuro el mundo en el que vivimos.

Vuelvo a la pregunta anterior...

¿Qué haces tú cuando llega la aflicción? 

En mi caso, cuando la situación me supera, cuando veo venir la tormenta y no se cómo seguir, voy al encuentro del buen Capitán. Le entrego toda mi carga y mi afán.

En la Biblia descubro maravillosos ejemplos de personas que, en la hora más oscura de sus vidas, cuando todo era dolor, llanto, amargura y desesperación, fueron capaces de tomar la mejor decisión.

Se alegraron en el Señor. Se refugiaron en Dios. Se abrazaron a la esperanza de la vida eterna. Mantuvieron los ojos en el cielo, aunque seguían con el sufrimiento de la Tierra. 

Me encanta el ejemplo de Habacuc. No sé si alguna vez has leído este libro que se encuentra en el antiguo testamento. Son tan solo tres capítulos pero contienen algunas palabras que para mí son como perlas preciosas.

Habacuc vivió unos 600 años antes que viniera Jesús. 

No se sabe mucho de este siervo del Señor, pero en su libro queda claro que era un verdadero creyente, un adorador que tenía la confianza puesta en el Creador.

Considerando la situación actual, con lo que acabo de mencionar sobre Ucrania, y toda esta guerra, no puedo evitar pensar que, tenemos una gran necesidad de personas que sean los Habacuc del presente.

Habacuc significa: "Uno que abraza", "Uno que alienta".

Habacuc es llamado por Dios para avisar a los habitantes de su nación que se acerca la destrucción. 

Habacuc habla con fervor, quiere que escuchen su llamado de atención. El espera que por fe todos se arrepientan y cambien de dirección.

El libro comienza con un diálogo. Es el mismo profeta quien está hablando y se está quejando, pero no lo hace con la gente a su alrededor. El descarga su queja delante del Señor. 

Este hombre observa su entorno y no puede salir de su asombro. Realmente está perplejo, está espantado. 

Primero se queja porque ve mucha injusticia en la sociedad. Luego se queja porque ve que a los malos les va bien y a los buenos les va mal.

Pero lo que no puede entender es que Dios permita que una nación pagana y pecadora ataque a su pueblo y les destruya por completo.

En un momento, este hombre,  lanza esta gran pregunta: 

Señor... ¿Por qué no actúas?. ¿Por qué no intervienes y haces algo para detener a los malvados?

Pero, luego de este diálogo nos encontramos con Habacuc orando, y es en la oración donde encuentra ayuda para soportar la dolorosa situación.

La lectura de la Biblia me permite entender que, es en la oración y en la comunión con Dios, donde el ser humano puede encontrar gozo y profunda paz aún en la adversidad.

Termino la Bitácora de hoy con estas preciosas palabras de Habacuc:

"Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos; aunque falte el producto del olivo, y los labrados no den mantenimiento; y las ovejas sean quitadas de la majada; y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en el Señor, y me gozaré en el Dios de mi salvación."

Habacuc 3:17-18

Habacuc termina su libro afirmando su fe en el Dios Santo y dice que de Él viene su fortaleza para superar tanta tristeza.

 

En el último versículo hace una hermosa comparación, diciendo que el Señor le ha dado una nueva capacidad. Ahora tiene pies ligeros como los de un ciervo, el puede elevarse a las alturas como lo hace una cabra, que tiene la capacidad de avanzar subiendo pendientes por donde otros no pueden caminar.

Habacuc 3:19

"El Señor y Dios, es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en las alturas me hace andar."

¡Oh sí, qué precioso es nuestro Dios! En verdad son dichosos todos aquellos que se aferran a su Palabra por fe y siguen avanzando aunque no puedan ver. 

Te recuerdo que hoy tenemos que encontrarnos con toda la tripulación de la embarcación. Se sabio y no faltes a la reunión.

Soy Gerwuer y me despido hasta un próximo encuentro, con la bendición de Dios.

Lectura Anual 📖

Proverbios 15 al 19

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