Día 25 -El dulce canto de la Sirena.

Martes 25 de Enero de 2022

Amanece nublado y con neblina. ☁️🌡️ 3°

Bitácora 📝

"Querido Capitán, Señor y Padre Celestial, aquí estoy frente a ti una vez más.

Comienza un nuevo día y por delante veo solo oscuridad. La neblina lo cubre todo y no sé bien cómo avanzar.

En todo tiempo necesito escucharte pero en esta mañana lo necesito mucho más.

Oh Señor ayúdame a escuchar solo tu voz y la de nadie más.

Deseo navegar con cuidado. No me quiero olvidar los consejos que ya me has dado. 

Sé que estamos avanzando por aguas peligrosas y se escuchan una voces maravillosas que me arrastran hacia las profundidades del mar. 

El enemigo es astuto y perverso.

Sé muy bien que me quiere engañar y si lo escucho terminaré mal.

Oh mi Capitán, querido Padre Celestial recuérdame siempre tu Palabra y guárdame de todo mal.

Te lo pido en el nombre de tu amado Hijo quien se mantuvo firme solo recordando lo que tú dejaste escrito."

Amén

Esta mañana lo primero que hago es acudir al Capitán y pedir su protección.

Él conoce estas aguas que se ven tan cristalinas y sabe lo que se avecina. Él nunca se confía cuando hay una densa neblina y sabe también que la oscuridad no me permite avanzar con tranquilidad.

Según cuenta la mitología griega, hay que tener mucho cuidado cuando se navega, porque en el momento menos pensado se oye el dulce canto de una sirena.

Según dicen, esto es algo que ya le ha pasado a muchos navegantes. Un descuido, un desliz y se dejaron llevar por la preciosa voz de esta mujer tan atractiva de la cintura para arriba.

Yo no se si esto es verdad pero dicen que su voz es tan real, tan especial, tan suave y cariñosa que te obliga a seguirla y hacer con ella cualquier cosa. El problema es que todo es un tremendo engaño. Los que la han escuchado terminaron en lo profundo del mar ahogados.

Hoy sigo leyendo el Libro del Capitán. Comienzo con el Capítulo 3 en Génesis. Esta sí es una historia verdadera aunque no se trata de una sirena.

Génesis 3:1-5

"Cierto día, la serpiente, que era el más astuto de todos los animales del campo que el Señor había creado, se acercó a la mujer y le pregunto: 

-"¿Es verdad que Dios no les permite comer de ningún fruto de todos los árboles que hay en el Jardín?"

La mujer le respondió diciendo:

 -"Podemos comer del fruto de todos los árboles, tan solo Dios nos ha dicho que no debemos tocar ni comer del fruto del árbol que está en el medio del huerto, pues si lo hacemos moriremos."

 

La serpiente entonces contesto:

-"¡No, de ninguna manera, no van a morir! En realidad lo que sucede es que Dios sabe que cuando ustedes coman de ese árbol, sus ojos se abrirán y serán como el mismo Dios, conociendo el bien y el mal"

La serpiente al igual que la sirena con sus palabras dulces te atrapa, te confunde y te arrastra.

Hoy una vez más el Capitán me habla y me recuerda la advertencia de la semana pasada:

¡Camina con cuidado!

Pero también me lleva a pensar en lo que escribí ayer.

"Ten mucho cuidado con lo que escuchas, lo que lees y hasta con aquello que piensas o sueñas.

Si una enseñanza o una emoción no se ajusta a la Verdad que el Señor ya nos ha dejado escrita entonces presta mucha atención porque te estarán desviando en otra dirección."

Unas palabras más para terminar:

Te aseguro que la serpiente es muy real y así como lo hizo en el principio, hoy sigue actuando igual. 

Se presenta como la sirena de la mitología griega. Tiene una voz tan maravillosa y te ofrece justo esa cosa que tanto anhelas alcanzar pero que te desvía hacia el mal.

Tengamos mucho cuidado. Avancemos lentamente. Orando en todo tiempo sabiendo que el peligro está presente.

Hasta la próxima

Gerwuer

Lectura Anual: Éxodo 27 al 29