Día 159 - La Perla de la Sabiduría.

Miércoles 🌦️🌡️11°

Hoy es 08 de Junio de 2022

La Bitácora de Gerwuer 📝

"La Sabiduría vale más que cualquier perla preciosa; y no se puede comparar con nada que podamos desear."

Proverbios 8:11

Subido al Velero, navego y navego. Seguro estoy que llegaré al cielo. Sin temor sigo adelante sabiendo que el Señor es mi Comandante.

Sin miedo puedo avanzar, día tras día y sin dudar, porque tengo por Capitán al único capaz de  controlar, el viento, las olas y el mar.

¡Segura está la embarcación si Cristo tiene el Timón!

No hay Tempestad, no hay gran Tifón, no hay nada que pueda hacer naufragar el velero del Señor.

Cuando aquieto mi alma, cuando aparto un tiempo para orar, leer la Biblia y reflexionar es cuando el Capitán puede obrar y me puede transformar. Su voz me quita toda ansiedad, aunque las pruebas vengan sin parar.

Cuando dejo de pensar en lo que quiero lograr; cuando dejo de soñar con ser grande y triunfar; cuando dejo de buscar un tesoro terrenal y me ocupo de lo celestial es cuando algo nuevo comienzo a experimentar. 

¡Buenos días Navegantes!

¡Bienvenidos los Visitantes!

Arriba los Marineros. 

Es tiempo de que avancemos.

Así comenzamos esta nueva jornada, con la mente abierta para recibir la Palabra Sagrada.

No dejes para el final del día tu encuentro tan importante con el Buen Comandante.

Desde que comenzamos este mes de Junio el desafío ha sido el mismo: "Levantarse temprano para recibir instrucciones de lo alto"

Todos tenemos cosas para hacer pero, si no damos prioridad a la voz del Capitán, lo más probable es que, al final estemos tan cansados que, escuchar su voz, se vuelva algo pesado. 

Cuántos hay que dicen:

"- A la noche tranquilo voy a orar y leer el Libro del Capitán..."  

Pero luego se quedan dormidos sin poder meditar.

Mi recomendación es organizar bien el tiempo. Es mejor comenzar de a poco, pero ser constante, que hacer mucho el primer día y luego no poder seguir adelante. 

Es mejor cinco minutos temprano y atento que una hora al final, distraído y dormido sin fuerzas para continuar.

Hoy he compartido un versículo muy especial en el capítulo 8 de Proverbios.

Algunas Biblias en español lo traducen diciendo que la sabiduría es mejor que las "piedras preciosas" y eso es verdad, pero para mí ha sido grato descubrir que, en realidad Salomón estaba comparando la sabiduría con las perlas.

Las Perlas y las piedras preciosas tienen algo en común. Solo se encuentran en las profundidades.

Hay que arriesgarse, sumergirse y buscar mucho para encontrar una perla.

Lo mismo sucede con aquellas piedras de tanto valor, como la esmeralda, el rubí, o un precioso diamante. Para encontrar esto hay que profundizar bastante y no se encuentran en todas partes.

Algo para destacar sobre las perlas es que también son piedras preciosas. Es la única piedra que se forma dentro de un organismo viviente. 

Debes saber que existen perlas artificiales y perlas reales. Perlas cultivadas por el hombre y perlas naturales.

Por supuesto que la perla natural es la más difícil de encontrar y es también la de mayor valor en el mercado.

¿Cómo se forma una perla natural?

Es algo asombroso, maravilloso y hasta podría decir misterioso.

No puedo detenerme a dar toda la explicación de la formación de una perla, pero quiero dejar este dato para el que no lo sabe:

Una perla nace de una herida producida en el interior de un molusco, ya sea una ostra o un mejillón. 

El proceso comienza cuando, por ejemplo, un molesto parásito, se mete dentro de una ostra causando gran irritación, o también cuando por accidente un grano de arena entra y le causa una profunda herida al mejillón. Entonces comienza la gran función.

Como el molusco no puede eliminar el problema, es decir ese malvado parásito o ese grano de arena que lo ha lástimado, la única opción que le queda es recubrirlo con nácar. 

 

El proceso es largo y lleva muchos años, pero al final se forma una perla preciosa. 

Esto me da la oportunidad de mencionar lo que en este velero buscamos los navegantes del Capitán.

Me refiero a La Perla de gran precio. Una Perla maravillosa, preciosa, única y sin comparación.

Esta Perla se formó por causa de la mayor herida que se pudo provoca en la creación. No fue un parásito, no fue un grano de arena, fue el pecado que todo lo destruye y envenena.

Esta preciosa perla ya no se encuentra en la tierra o en el mar, sino en la Patria Celestial y hacia ese lugar nos dirigimos al navegar.

Vale la pena perderlo todo por alcanzar esa Perla sin igual. Es la misma Sabiduría, es el Verbo inspirado, es el aliento de vida, La Palabra Sagrada, es aquel que comenzó todas las cosas y esta Perla se encuentra arriba, por eso dejamos de lado las cosas que están aquí abajo.

No quiero terminar la Bitácora de hoy sin presentar lo que podríamos llamar: 

"La perla de Noé." 

Ayer mencioné que hoy hablaríamos de Sem. El cual considero que es el tercer hijo de Noé, aunque siempre lo vemos en primer lugar. 

Quisiera que recuerdes el significado del nombre Sem.

Significa "Nombre"; "Renombre"; Fama; Honor. 

Es que este hijo traerá mucho honor y su descendencia será de gran valor para la futura generación.

Pienso que es como una referencia al "Nombre sobre todo nombre", el nombre del único que merece toda la fama, el reconocimiento y el honor: Jesucristo, nuestro Señor y Salvador.

Leamos cómo comienza la descendencia de Sem:

Génesis 10:21

"También le nacieron hijos a Sem, padre de todos los hijos de Heber, y hermano de Jafet el mayor." 

Aclaro que así traduce este Versículo la versión conocida como "La Septuaginta", o "La Traducción de los 70" que es la más antigua traducción de los libros del Antiguo Testamento al Griego.

En este caso nos da a entender que Jafet era el hermano mayor de Sem. (De esto ya hablé 👉 aquí)

Termino por hoy la Bitácora pero quiero invitarte a buscar y descubrir 👉 La Perla del Navegante.

Como ya dije no es una piedra preciosa que se encuentra en la superficie de la tierra, ni es una perla que se encuentra en el mar.

Es la Perla de la Sabiduría, es Cristo mismo y si lo buscas lo puedes encontrar. Si lo llamas, él vendrá y te salvará.

Cómo dice el Versículo al comenzar: No existe mayor tesoro que puedas encontrar y no se compara con nada que puedas desear.

Jesucristo es la Sabiduría del Cielo y si por fe lo recibes, tendrás un tesoro de valor eterno.

Hasta la próxima te saluda Gerwuer ⛵ el marinero.

Para conocer más sobre La Perla del Navegante quiero invitarte a escuchar el Podcast 🎙️ en las principales plataformas:

"La Perla del Navegante"

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Lectura Anual 📖

Salmos 24 al 28